Paula es una niña que tiene 10 años, su abuelo Miguel lleva mucho tiempo diciendo que este año va a llegar el fin del mundo.
Un día Miguel le regaló a su nieta una camiseta que estaba envuelta en hierro y una gorra que tenia pegado un bol de metal. A Paula no le gustaba, pero para no hacerle daño a su abuelo, lo guardó en un cajón.
Una semana más tarde ella fue a la casa de su abuelo. Las calles se empezaron a romperse Miguel dijo: ¡Ha llegado el fin del mundo todos a salvo!
Se fueron a la tercera habitación que el abuelo había preparado hace un tiempo para cuando llegase ese momento.
A las diez horas se atrevieron a salir, en todo el pueblo solo quedaban Paula y Miguel.
Ellos construyeron las cosas que les hacían falta y se acostumbraron a vivir solos.