Mientras vino nuestro maestro de educación física.
Nos pusimos a investigar a la clase del otro quinto. Descubrimos que todos los recreos cruzaban un portal.
Un día nos hartamos a si que decidimos cruzarlo. Entramos en un mundo en el que solo había mar, árboles y algas, muchas algas.
Seguimos caminando hasta que vimos a la clase de 5ºA bañándose en el río, pero "un momento", dijo mi amiga Rosebud, y dijo mi otra amiga Nala: "las niñas y los niños tienen cola de sirena".
Y ese fue el día en que descubrimos que el otro quinto eran sirenas y tritones.
Pasaron las semanas y volvimos a entrar en el portal y la clase de 5ºA nos vieron. Empezaron a huir pero Fugde, un niño de mi clase que nadaba muy rápido fue a por ellos. Los niños y las niñas de 5ºA dejaron de nadar y vinieron hacia nosotros. Empezaron diciéndonos que no se lo dijéramos a nadie y no nos harían nada. Nosotros le dijimos: "tranquilos no se lo diremos a nadie pero decidnos como en este mundo sois sirenas y nosotros no. Una de 5ºA se acercó a la orilla y dijo: cuando descubrimos el portal un búho nos leyó una profecía, que los niños y niñas de 10, 11,12 y 13 años entran en el mar se volverán sirenas y tritones, entonces decidimos probarlo.
Cuando termino la niña de hablar nosotros nos metimos y ese fue el día en que nos volvimos sirenas y tritones.