lunes, 2 de noviembre de 2020

Texto libre. La niña y las calabazas

Había una vez una niña que en Navidad y en Halloween nunca sabía que debería hacer. En dos semanas era Halloween y todavía no sabía que debería hacer. Su padre tenía muchas calabazas y su madre hacía velas. La niña pensaba casi tres días que debería hacer. Pensaba, pensaba y pensaba pero no sabía qué debería hacer.

Una mañana estaba andado dentro de las calabazas de su padre y veía que una de las calabazas tenia una cara y en ese momento supo qué debería hacer. Corrió a su casa y le preguntó a su padre si podía recortar una calabaza para Halloween. Su padre le dijo:

- ¿Por qué para Halloween? Las calabazas no tienen nada con Halloween.

- Sí - dijo la niña- pero cuando les pones una cara se ven como una calavera y las calaveras sí son de Halloween.

Su padre le dijo que también podía recortar cinco y la niña las recortó.

Le preguntó a sus amigas si querían una calabaza y todos decían si y al final lo pasaron genial.